En la actualidad los eSports han tenido un auge tan fuerte que ahora son participes de competiciones olímpicas, rodeadas de los deportes tradicionales con sus altísimas exigencias físicas y bien regulados laboralmente a los atletas inscritos.
Sin embargo, en el caso de los eSports existe un vacío legal en este aspecto donde no solo es necesario armonizar las relaciones entre clubes y jugadores, sino también una vinculación laboral que pueda condicionar los beneficios por derechos de imagen, las bajas laborales, vacaciones, cotización a la Seguridad Social, visados y permisos de trabajo, cesiones.
Al momento las asociaciones entre club y jugador,son bien diferentes a como son comercialmente, el equipo es quien paga el desplazamiento, estancia e inscripción junto con un reparto de los premios obtenidos según el porcentaje acordado entre ambos.Cuando lo ideal será que existiese un contrato de trabajo adaptado a la circunstancia de los clubes.
Lo ideal sería un vinculo, donde el jugador y/o empleado cumpla con todos los requisitos establecidos por el estatuto referente al trabajo (regularidad, ajenidad, voluntariedad, dependencia y remuneración), no siendo estos su única ventaja, sino que por el contrario atacaría de forma inmediata la relación que tienen los profesionales de otros deportes con sus clubes y es la disciplina de club. LEA AQUÍ: ESPAÑA YA TIENE SU FEDERACIÓN DE ESPORTS
Esto ultimo significa, que formar parte de un club supone acatar sus normas, códigos éticos, medir declaraciones y guardar fidelidad hacia su cliente, cosa que por su relación mercantil ante la ley no tiene medidas proteccionistas que le impidan incumplir.
En cuanto a responsabilidades tributarías los clubes a nivel mundial puede decirse que están bien regulados, debido a que estos esta constituidas bajo sociedades y/o personas jurídicas, diferenciando de los jugadores quienes continúan siendo persona natural y deben declarar los ingresos obtenidos directamente por concepto de premio en la declaración de renta, ya que esto se trata de un incremento patrimonial.
Estas mismas discriminaciones suceden en cuanto a lesiones, vacaciones y permisos de residencia.
Si el jugador aparece ante la ley como independiente deberá responder por si mismo ante una lesión o enfermedad, además de no poder optar por tener vacaciones remuneradas.


