Los operadores de casinos colombianos han venido trabajando y concentrando todos sus esfuerzos para comprender a mayor profundidad sus clientes y jugadores, pues han entendido que el mercado colombiano también es dinámico y que los clientes comprenden a mayor cabalidad que en Colombia también debe haber servicios como en las grandes capitales del juego, donde el cliente es lo primero para el operador.
Convirtiéndose así en una sociedad de mutuo compromiso y retroalimentación entre el operador y el jugador donde poco a poco se han ido incluyendo autoridades de los juegos de suerte y azar que también tienen su interés concentrado en que este sector crezca de la manera correcta para todos. LEA AQUÍ: COMPAÑÍA SUDAFRICANA DE CASINOS VA A SALIR DE CARTAGENA
Es por ello que el pasado 26 de julio de 2018, uno de los casinos prestigiosos de Cartagena celebro su nuevo espacio pet-friendly.
Donde invita a los usuarios que no tienen porque dejar de asistir a las cosas que les gustan como el casino porque no tienen con quien dejar a su amigo perruno.
El Casino Bocagrande que pertenece a la multinacional Sun International, ubicado en la carrera tercera con calle sexta esquina (Cartagena), es el primero en adoptar en la ciudad una política pet friendly para que sus clientes no tengan que dejar solas, o al cuidado de otras personas, a sus mascotas mientras disfrutan de su juego favorito o pasan una tarde agradable con amigos.
De acuerdo con Leonardo Pacheco, CEO de Sun Dreams Colombia, la idea es integrar el establecimiento y sus dinámicas, a las de las personas con mascotas, que muchas veces ven reducidas sus opciones de entretenimiento en la ciudad porque muchos negocios comerciales no aceptan el ingreso de mascotas.
“Para celebrar la entrada del casino a la nueva tendencia pet friendly, el 26 de julio invitamos a todos los amantes de las mascotas a que se acequiarán, desde las 5 p.m. al Casino Bocagrande, y pudieran vivir una jornada especial, con concursos y muchas sorpresas para sus mascotas”, aseguró el CEO Pachecho.
Esto es una pequeña muestra de como un casino puede innovar en las necesidades que aquejan sus clientes, permitiendo fomentar con mayor dinamismo el lazo entre operador y jugador, lo que consecuentemente forja mayor lealtad y amor por el casino al que recurren.


