El Trump Plaza Hotel and Casino de Atlantic City ha sido demolido, poniendo fin a casi 40 años de historia entre la costa de Nueva Jersey Y Donald Trump, ex presidente de los Estados Unidos.
El establecimiento abrió en 1984 durante el boom del juego en Atlantic City, la única ciudad que desafió el monopolio de Las Vegas, con máquinas tragamonedas. En su apogeo, el Trump Plaza empleó a 6.100 personas con ingresos de millones de dolares a causa de los juegos de suerte y azar. Pero la apertura de otros establecimientos en los Estados cercanos como Pensilvania, Delaware, Maryland y Nueva York marcó el inicio del declive de la ciudad, donde en su tiempo hubo 13 casinos, y hoy solo nueve.
La generalización de las apuestas deportivas en red y la crisis económica de 2008 propinaron un duro revés a la industra en esta ciudad del país. El establecimiento cerró en 2014, no sin presentar un expediente de quiebra entre otros intentos de reestructuración del negocio.
El Trump Plaza era el casino con peor desempeño en Atlantic City cuando cerró, recibiendo en ocho meses y medio el mismo dinero de los apostadores que el hotel y casino Borgata, líder del mercado, obtenía cada dos semanas.
Atlantic City, de 38.000 habitantes, no levanta cabeza. Amenazada de quiebra hace un lustro por la crisis de los casinos, el cierre de los locales por el coronavirus dejó el año pasado a 27.000 personas en la calle, antes de una reapertura.
El inversionista multimillonario Carl Icahn es actualmente el propietario del sitio y no ha anunciado planes futuros para él. Aproximadamente 3.000 piezas de dinamita se utilizaron para hacer implosión del edificio de 34 pisos el dia de ayer, miercoles 17 de Febrero.
A la implosión acudieron espectadores en masa a la zona y los hoteles cercanos ofrecieron paquetes VIP para obtener vistas privilegiadas, entre ellos estaban el Hard Rock Hotel, anteriormente el casino Trump Taj Mahal. Otro antiguo casino de Trump, el Trump Marina Hotel Casino, ahora funciona como Golden Nugget.
El alcalde de Atlantic City, Marty Small Snr, había tratado de subastar el derecho de presionar el botón de demolición para recaudar fondos para obras de caridad, pero fue detenido por Icahn, quien citó preocupaciones de seguridad y apoyó a Trump como presidente.
La relación de décadas de Trump con Atlantic City ha estado marcada tanto por una ambición grandiosa como por unas finanzas inestables. Su propiedad más conocida, el hotel y casino Trump Taj Mahal, que una vez llamó “la octava maravilla del mundo”, que cerró oficialmente en 2016. Desde entonces, ha reabierto bajo la marca Hard Rock.
En 2014, Trump demandó a Trump Entertainment Resorts para quitar su nombre de ambos casinos. Dijo en la demanda que Trump Resorts había permitido que el Taj y su casino hermano, el Trump Plaza, “cayeran en un estado de deterioro total”, lo que manchó la reputación de su marca.


