Es, de las principales ciudades del país, la primera con mayor número de casinos y la tercera, después de Villavicencio y Armenia, con el crecimiento más acelerado en los últimos dos años. Según Coljuegos, encargada de su regulación, la capital pasó de tener 450 en el año 2012 a 587 en la actualidad. Así las cosas, sin contar con el elevado número de casinos que permanecen en la ilegalidad, en promedio cinco sitios de este tipo abren sus puertas cada mes en Bogotá.
Algunos están abiertos desde las 8 de la mañana y cierran hasta después de las 9 p. m. Más allá de las apuestas y el juego, hay infracción de las normas. Mientras solo 587 establecimientos dedicados a los juegos de azar (incluyendo bingos y casinos) están autorizados para operar solo en la capital de Colombia , en cuentas de la subdirección de seguimiento a la gestión de inspección, vigilancia y control de la Alcaldía Mayor hay más de 2.000 abriendo sus puertas.
El elevado número prendió las alarmas, por lo que la Secretaría de Gobierno y Coljuegos han venido trabajando para poner en cintura estos sitios.
De acuerdo con Cristina Arango Olaya, presidenta de Coljuegos, en lo corrido de 2014 se han realizado operativos en varios de estos establecimientos. “Tenemos un equipo que se encarga del control de operaciones ilegales, con un importante apoyo de la Policía Nacional. Tan solo en 2014, este equipo ha realizado 155 acciones de control en diferentes ciudades del país, mediante las cuales se han desmantelado 125 establecimientos de juego ilegales”, explicó.
Para ver la magnitud del crecimiento en el número de casinos en la ciudad, basta con ir a Engativá –la tercera localidad con más presencia de lugares para apostar, después de Kennedy y Santafé–. Desde allí se ve el boom alrededor de los juegos de azar. Dos de los puntos de concentración de establecimientos son los barrios Villas de Granada y Quirigua, ubicados en ese sector del noroccidente de Bogotá, donde es posible conseguir fácilmente un casino cada dos cuadras. En todos, el atractivo principal son las máquinas tragamonedas, seguidas por las ruletas. En datos de la subdirección de vigilancia, el fenómeno no solo ocurre allí; todas las localidades superan los 30 establecimientos similares.
Una de las preocupaciones que tiene el Distrito frente a este tema es la llegada masiva de máquinas tragamonedas en tiendas, droguerías o cualquier otro sitio que no están autorizados.


